Insurrectos En El Horno

Y dijo el “Sr” Alejandro -amigo de la casa- “que, las mujeres pueden hablar de otra cosa que no sean hombres??”

Y yo… un rato mas tarde, desde la reposera, con terere de limonada en mano (hecha con 2 limones “sutiles” – y lo pongo entre comillas por si algún distraído no se da cuenta que no es que el limón sea delicado, atento, tierno, suave ni cortés con nuestros cuerpos, sino que así se denomina el árbol de dónde lo obtuve - por litro d agua y azúcar a gusto del consumidor) y mirando el sol radiante en el cielo infinito - faaaa, que poética me puso el cloro - pensaba y repensaba serenamente en los alcances de esta cita en mi integridad y por que no, en mi ego también, ergo… lejos de salir con la bandera del feminismo debido a que mi vida sin los hombres es como un fernet sin coca (¿?) tengo que decirlo! Agresioooooooón!!!! Un poco de justicia para el género!

Sinceramente esto de que se crean indispensables nos cansa - si, si, en plural chicos - PIEDAD! Nos cansa porque sepan que si nosotras les dedicamos algún segundo de nuestras vidas - segundo que puede extenderse en 3 o 4 horas con tendencias a infinito dependiendo de la gravedad del asunto que nos convoque - seguro es para contar todas las chantadas que se mandan, todas las pavadas que dicen, todos los chistes malos que no nos causan gracia, todo lo que no los entendemos – no por babachas sino porque no suelen ser muy claros en general - y quizás, alguna que otra cosita a favor, alguna que otra actitud copada de caballero de la mesa redonda (de luz) que tienen cuando están inspirados - pero, no se emocionen porque no suceden a menudo estas dos últimas - y eso NO es nuestra culpa, claramente.

Una vez transcurridas esas 3 o 4 horas - o los 2 o 3 minutos – podemos seguir con nuestras vidas – ya más relajadas - tratando las diversas temáticas que nos aquejan en el universo femenino – donde no participan en ninguna mal que les pese - y que verdaderamente nos importan, a saber: cuantas materias rendiremos, cuantas tortas prepararemos y luego nos comeremos – y con cuantos termos de mate las acompañaremos - cuantas dietas hicimos - y echamos a perder en las fiestas - de que color nos gusta el esmalte de uñas y si las preferimos redondeadas o cuadradas, cuantos cortes de pelo y cambios de look descubrimos solo por aburrimiento - o por innovadoras que somos - de que están hechas las salchichas - y sus respectivas justificaciones – de cuan feas salimos en las fotos del finde, de que rayos pretendemos de nuestras vidas a futuro, y todo tema charlable que se nos pase por nuestras cabecitas en ese instante de distención amistosa.

Por ende – Atenti este punto!! - en un servicio de extensión hacia ustedes caballeros, en caso de no tener el bloc de notas a mano, deberían anotarlo en la mano - cuac! - derecha: solemos tener la capacidad de tratar dos o tres temas (de los antedichos u otros) a la vez - y, si es necesario y/o la compa de charloteo de turno lo solicita, cambiar el rumbo del tópico sin requerir permiso previo para volver al anterior cuando así se pretenda, sin olvidarnos lo último que dijimos y sabiendo perfectamente que será lo próximo que diremos y, en casos donde intervenga una pc, sin que importe cuantas veces se corte el servicio de internet… siempre, SIEMPRE, sabremos de que hablamos - por su seguridad hágase copia en mano izquierda, no sea cosa que justo ese día se lave las manos y se borre alguno de todos estos importantísimos items -.

Es así que por estas razones - y no por otras – y para que tampoco digan que no les avisamos, los que nos subestimen, por lo menos, tengan a bien abstenerse de boquear como peces y quedar como unos verdaderos salames de Milán porque, a pesar de todo, los queremos.